El edificio abandonado del Ministerio de Salud en barrio Bella Vista se convirtió en un criadero de mosquitos y aguantadero de delincuentes. La situación viene de años y los vecinos ya no saben a quien recurrir por ayuda, pues el exIntendente Oscar «Nenecho» Rodríguez, y su recomendado, el actual jefe comunal Cesar Ojeda, ignoraron las denuncias, comentó el sociólogo Nicolás Chase, postulante a la Junta Municipal por PPQ. Este indicó que la comuna debe intervenir de inmediato el sitio para la limpieza y que la cartera sanitaria debe ser multada.
«Los vecinos vienen sufriendo hace años esta dejadez del Ministerio de Salud, que debe velar por el bienestar de la población; y de la omisión de la Municipalidad de Asunción, que debe garantizar la calidad de vida de los vecinos. No puede ser que nadie responda a las necesidades de estos pobladores, que viven siendo invadidos por mosquitos, ratas y otras alimañas, además de la inseguridad que genera un aguantadero de delincuentes en la cercanía de sus hogares. Los frentistas temen por la seguridad de sus hijos», señaló Chase, que se presenta a la concejalía por el Partido Patria Querida, Lista 8, Opción 6.
Agregó que los afectados ya efectuaron varias denuncias a la Intendencia, pero que no hay respuesta. «De inmediato la Municipalidad debe notificar al Ministerio de Salud, a cargo del Dr. Julio César Borba Vargas y proceder a la limpieza y los costos deben ser absorbidos por la cartera de Estado», señaló el sociólogo.
Chase anunció que dará seguimiento a esta denuncia vecinal hasta que se de una solución. «Estamos entrando en el tiempo donde los casos de dengue aumentan y es una vergüenza que el propio Ministerio de Salud tenga este mega criadero de mosquitos, además de refugio de rateros. Más vergonzoso es que la Intendencia se ocupe de cualquier verdura y desatienda este clamor vecinal», señaló el candidato a la Junta.
Según los antecedentes, el edificio abandonado es una obra que comenzó a levantarse a inicios del Gobierno de Horacio Cartes. Se trata de la futura sede del Instituto Nacional de Nutrición (INAN), dependiente del Ministerio de Salud. El edificio avanzó en un 70% luego quedó parado por problemas en el contrato. Un tiempo tenían cuidadores de la empresa constructora (M&T, de Adolfo Benigno Mendoza), pero luego terminaron por abandonar completamente el lugar, dejando un grave problema en el barrio.