El presidente Mario Abdo Benítez destituyó esta mañana al ministro del Interior, Arnaldo Giuzzio por su relación con el narco Marcus Vinicius Espíndola Marques de Padua. Remplaza al exsenador el ministro-asesor Federico González. El mandatario saca además a Cecilia Pérez del Ministerio de Justicia y la ubica como su asesora en temas de seguridad. Giuzzio, además de tener contacto con uno de los narcos más buscados de Brasil, usó uno de los vehículos de la empresa del hoy detenido para ir a vacacionar al Brasil. Ya cuando era titular de la Senad, Giuzzio sabía que Espíndola Marques de Padua era un objetivo de las fuerzas de seguridad del vecino país.
El ministro del Interior, Arnaldo Giuzzio, fue apartado del cargo tras reconocer que tuvo trato con el narcotraficante brasileño Marcus Vinicius Espíndola Marques de Padua. En su reemplazo fue designado el embajador Federico González. En tanto, la ministra Cecilia Pérez fue nombrada asesora en Asuntos de Seguridad de la Presidencia.
La información fue confirmada por el jefe de Gabinete Hernán Hutteman. Esto como consecuencia de la confesión de Arnaldo Giuzzio, de que el narcotraficante brasileño Marcus Vinicius Espíndola Marques de Padua -detenido hace una semana en Foz de Iguazú y cuya esposa, Jussara Cabral, es accionista de Tabesa SA- lo visitó el año pasado para ofrecerle implementos de seguridad a través de su empresa, Black Eagle SA.
Además, el hasta hoy ministro del Interior contó que alquiló un vehículo de otra de sus empresas en diciembre de 2021 porque el suyo se había averiado. Alegó que cuando se realizó la verificación de sus antecedentes, Espíndola estaba “limpio”.
“Le conozco a este señor desde el año pasado, nos ofreció materiales balísticos, chalecos, vehículos blindados también (…) Inclusive había presentado una exhibición de sus chalecos, fue particular. Invitamos a otros referentes de la Senad, Policía, hicimos un chequeo de la empresa en Paraguay; todo aparentaba normal. Recibimos a esta empresa como a tantas otras empresas”, declaró Giuzzio hoy con llamativa sinceridad.
No obstante, Giuzzio aclaró que “el contacto no pasó de eso”, y que si el hombre llegaba a convertirse en proveedor del Estado, “sí se iba a profundizar el análisis sobre el proveedor”, añadió el entonces ministro.
Justamente, la semana pasada también se conoció que la esposa de Espíndola Marques de Padua, Jussara Cabral, es accionista de Tabacalera del Este SA (Tabesa), propiedad del expresidente Horacio Cartes, investigado por contrabando y lavado de dinero.
En otro momento de su extraña confesión, Giuzzio señaló que cuando se enteró de que Marcus Vinicius Espíndola Marques de Padua fue detenido la semana pasada en el Brasil, lo comentó “de forma jocosa” con la ministra de la Senad, Zully Rolón.
Guzzio ya sabía quien era Espíndola Marques de Padua
El fiscal de asuntos internacionales, Manuel Doldan Breuer, dijo que hace mucho más de un año en la Senad, cuando Arnaldo Giuzzio era incluso el titular de esa institución, Brasil envió informes de que Espíndola era un objetivo de las fuerzas de seguridad del vecino país por estar ligado al narcotráfico internacional. Esta información de inteligencia eran manejada por la mencionada secretaría y por la fiscalía.
Esto evidenciaría que Giuzzio mintió al decir que cuando tuvo contacto con Espíndola, a finales del año pasado, éste no tenía ningún antecedente, por lo que no sabía de sus vínculos con el crimen organizado. Pese a la información manejada por la Senad, en tiempos de que Giuzzio estaba al frente, el ministro del Interior prestó una camioneta de la empresa del narco para ir a Brasil a vacacionar.