El senador colorado Martín Arévalo, denunciado por tráfico de influencias por el propio Gobierno, tiene un equipo de dirigentes de base bien formado en Capital, por lo que tratar su perdida de investidura a menos de 30 días de las elecciones municpales podría desencadenar consecuencias que afectarían las chances del intendetable «Nenecho» Rodríguez, alertaron dirigentes del centenario partido.
Arévalo es seccionalero de hace décadas y desde la Junta Municipal de Asunción supo fortalecer un buen equipo dirigencial. Este grupo de dirigentes de base que le son leales, entre ellos varios funcionarios aduaneros, podrían hacer brazos caídos el 10 de octubre en caso de que prospere el pedido de pérdida de investidura del mencionado senador.
Uno de los perjudicados con un eventual castigo a Arévalo sería Oscar «Nenecho» Rodríguez, es decir la ANR en general y el cartismo en particular, ya que el candidato colorado necesita de todos los votos partidarios para mantener alguna chance frente al candidato de la alianza, el liberal Eduardo Nakayama.
Arévalo fue denunciado ante la Fiscalía por el director de Aduanas, Julio Fernández, por tráfico de influencias, ya que, según el funcionario de Gobierno, el senador presionó primero por ubicar a funcionarios en puestos claves de recaudación e intercedió por una carga declarada como contrabando. Por su parte, el legislador dijo que la acusación obedece a su interés e investigación por el robo de containers en sedes aduaneras que salpican a Fernández y su equipo.
Ya varios legisladores hablaron de darle largas a este asunto del plan de perdidas de investiduras, pues el objetivo es primeramente enfriar el caso y eventualmente patear la pelota para después de las elecciones municipales del 10 de octubre.
